El Recuerdo Imborrable: La Masacre de Tlatelolco a 57 Años de Distancia

Ciudad de México, 2 de octubre de 2025 – Se cumplio 57 años de una de las jornadas más oscuras y dolorosas de la historia moderna de México: la Masacre de Tlatelolco. Aquel 2 de octubre de 1968, en la víspera de la inauguración de los XIX Juegos Olímpicos, la esperanza de cambio y la efervescencia juvenil fueron brutalmente silenciadas en la Plaza de las Tres Culturas.
Miles de estudiantes se habían congregado para un mitin pacífico, ejerciendo su derecho a la libre expresión y manifestación. El Movimiento Estudiantil de 1968 demandaba libertades democráticas y el cese a la represión gubernamental.
La respuesta del gobierno fue el terror. Lo que comenzó como una protesta cívica terminó en una masacre planificada y ejecutada a sangre fría por el ejército y grupos paramilitares, como el Batallón Olimpia. La plaza se convirtió en un campo de batalla donde el sonido de las balas ahogó las consignas.
Cientos de estudiantes y civiles murieron a manos de las fuerzas armadas. Aunque las cifras oficiales de la época intentaron minimizar la tragedia, investigaciones posteriores y testimonios documentaron la magnitud de la violencia, el número real de víctimas (entre muertos y desaparecidos) y la total impunidad con la que actuaron los responsables.
A 57 años de distancia, la herida de Tlatelolco sigue abierta. El 2 de octubre no es solo una fecha para recordar, sino un símbolo de la lucha por la justicia, la verdad y la memoria. Las movilizaciones anuales que recorren la capital exigen que estos hechos atroces no caigan en el olvido y que el Estado reconozca su responsabilidad histórica.
La frase “2 de octubre no se olvida” resuena con más fuerza cada año, siendo un recordatorio de que los crímenes de lesa humanidad deben ser condenados y que la defensa de los derechos humanos y las libertades civiles es una tarea permanente.

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